Criaturas fascinantes

«Hay un paisaje maravilloso bajo el mar que está ahí, pero desconocemos», afirma Manuel Lazkano, empeñado en mostrarnos toda esa riqueza de formas, colores y vida. Ayer se inauguró, con presencia del alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, la 31 edición del Ciclo de Cine Submarino, y también la exposición que durante esta semana se puede ver por las tardes en la misma sala Kutxa donde se realizan las proyecciones. La exposición reúne una selección de fotografías del experto buceador, fotógrafo y realizador mexicano Manuel Lazkano que a sus 47 años ha recorrido medio mundo...bajo las aguas. «He sido buzo toda mi vida, empecé a los nueve años y mi pasión por el mar y por las cámaras es mi forma de vivir», cuenta Lazkano. Entre sus muchos trabajos se encuentra la serie Aquatrix que se ha visto en Antena 3. «En ese proyecto quisimos hacer un acercamiento a la naturaleza para toda la familia, y tenía como protagonistas a dos adolescentes que van siguiendo a una chica que busca aventuras en la naturaleza». Con ese argumento Lazkano invitaba a descubrir los fondos marinos.

Otro de sus proyectos con mayor repercusión fue la exposición multitudinaria que realizó en el enorme paseo de la Reforma de México D.F. «Coloqué 152 imágenes de gran tamaño en el centro de la ciudad al aire libre, y la gente apreció de una manera impresionante ese trabajo, en el que reuní fotografía de todo el mundo submarino. No hubo ni un solo desperfecto. Era una exposición didáctica, para que la gente conociera las cosas que quedan fuera del alcance de su vista, pero están ahí cerca. Todas estas criaturas son fascinantes: las diferentes especies de ballenas, delfines, caballitos de mar, lo que es el mimetismo, la riqueza de los fondos marinos de todo el mundo...».

Tiburón martillo o cornuda, Sphyrna lewini

Lazkano ha seleccionado una treintena de esas imágenes para mostrarlas en esta exposición que presenta el Ciclo de Cine Submarino, al que ya había acudido en anteriores ocasiones como cineasta. «Francisco Pizarro es alguien muy importante en mi vida y en las de muchos otros pequeños y grandes productores de cine submarino. Nos trata a todos por igual. Es un hombre fuera de serie, tanto en lo humano como en su forma de dirigir el festival, y en el ambiente que crea a su alrededor es único», afirma Lazkano.

Como todos los devotos del submarinismo, no se cansa de alertar sobre los ataques al medio ambiente. «No sabemos el daño que estamos haciendo a los fondos marinos, con la contaminación y la pesca. Siento una responsabilidad muy grande al compartir imágenes con la gente y dar a conocer todo lo que hay ahí y la necesidad de protegerlo. Cada día el deporte del submarinismo es más accesible y hay gente más preparada, y todos debemos convertirnos en vigías de los riesgos que están afectando al ecosistema marino».

Y da pruebas: «Toda mi vida he buceado, y lugares que visité de joven y eran maravillosos, llenos de especies y de vida, ahora son auténticos desiertos marinos en los que no hay nada». Pero Lazkano también alerta sobre la parte buena: «He visto muchos lugares en los que se ha trabajado en la protección y se han conservado muy bien, los esfuerzos han dado resultados. Por ejemplo en la isla del Coco, en Costa Rica, sigue siendo un lugar único en variedad de especies y de salud en el agua. En cambio en otros lugares, a causa del turismo, han desaparecido sus formas, sus habitantes, sus colores...todo».

El tiburón no es malo como lo pintan. Es un tópico que Lazkano, como tantos otros, no se cansa de combatir. «Yo si oigo la palabra 'tiburón', me echo al agua con mi cámara. La realidad es que hace falta tiempo y dedicación para que se te acerquen. Es apasionante el mundo de los tiburones, son animales majestuosos e importantísimos, que no tienen nada que ver con esos asesinos de los mares. Los tiburones no comen gente, comen peces, pensar eso es una idea primitiva. Un perro o un caballo son más peligrosos».